El día de hoy exploraremos la importancia que la imagen visual puede llegar a tener para una marca, y cómo en ese sentido deben tomarse decisiones bien planeadas al momento de colocar algún tipo de bordados computarizados dentro de nuestros uniformes. Por muy raro que parezca, en algunos casos las prendas que componen este conjunto tan especial pueden llegar a crear una tendencia e introducirse en el mundo de la moda, por lo tanto, la fabricación de las prendas entran en un mercado masivo.
¿Suena increíble, no? Pues aunque alguien más haya desarrollado ese diseño siempre se tendrá en mente la fuente original. Para tener una mejor perspectiva del tema, el día de hoy vamos a repasar brevemente la historia de 5 de los trajes y uniformes más emblemáticos en la historia y cómo se han introducido en la percepción masiva de la población. Primero veremos algunos más generales y luego consultaremos algunos casos mucho más específicos.
Uniformes de futbol.
Estamos hablando de uno de los deportes más populares a nivel mundial, pero particularmente en nuestro país. La elección de un uniforme es tan importante que puede llegar a ser comentada en periódicos o redes sociales, tanto si es del gusto del público como si es repudiado por ellos. Pero no sólo se tratan de los colores para representar a un equipo sino que muchas veces se usan bordados computarizados para los logos de los patrocinadores, aunque últimamente estos se han visto sustituidos por impresiones digitales, dejando el bordado sólo en prendas más pesadas como sudaderas o chamarras.
Los uniformes de futbol han evolucionado para que el jugador pueda moverse fácilmente por la cancha. Aquí se cumplen varios de los requerimientos que hemos recomendado al momento de elegir un uniforme: combinar la funcionalidad con la estética. Y es que en este campo en particular hay un agente muy interesante que los hacen tan famosos: el sentimiento de sentirse identificado. Por eso las playeras de los uniformes pueden ser una gran oportunidad comercial: el público se siente tan relacionado con su equipo que siente la necesidad de usar algo del uniforme y crear un vínculo más fuerte con él.
Uniforme militar.
Durante la primera década del siglo XXI nos vimos invadidos por la moda con prints militares. Estaba simplemente por todas partes: bolsas, vestidos, botas. Todos querían usarlo y muchas estrellas nacionales e internacionales fomentaban la tendencia. Y es que junto con otros, el uniforme de los militares es fácilmente identificable y entre otras cosas envía diversos mensajes como: fuerza, valentía, seguridad, arrojo. Justamente por tener la capacidad de comunicar estos valores es que fue una tendencia tan popular.
Sin embargo, la tendencia fue bajando porque también se transformó la manera en cómo el público percibía a los militares. Muchas personas ya no se sentían cómodas teniendo una relación o un vínculo con ese sector de la población en particular. Aunque claramente, no importa si cambia el color o algún elemento mínimo, siempre será altamente reconocible pues conservan otras características básicas que siempre relacionaremos con los militares.
Conejitas de Playboy.
Hugh Hefner fue un gran visionario de la industria del entretenimiento, pero también de la comercialización de una marca. Playboy inició como una revista para el entretenimiento masculino en una época bisagra de la cultura norteamericana: la liberación femenina. Por lo tanto, muchos de los augurios era que la revista y todos sus proyectos paralelos se perderían. Sin embargo, Hefner logró adaptarse ligando la liberación femenina con el control que la misma ejercía sobre su propio cuerpo. Después de superar esa primera etapa logró consolidarse y comenzó a establecer una serie de restaurantes y bares.
El servicio al cliente era realizado por meseras con uniformes de conejita. Los elementos eran muy sencillos pero fueron sumamente efectivos: orejas de conejo, un corbatín de moño en el cuello, un body, medias y zapatillas con tacón. Aunque los restaurantes tuvieron un éxito efímero y a principios de los 80 tuvieron que cerrar, el uniforme se quedó como uno de los elementos más fuertes de la cultura Playboy, convirtiéndose tan icónico, casi al mismo nivel que el logo.
Meseras de Sanborns.
Ahora, abordaremos un ejemplo de uniformes emblemáticos en México, estamos hablando de la cadena de tiendas departamentales y restaurantes conocida como Sanborns. Sobre todo en los restaurantes es donde buscan darle ese toque moderno pero sin dejar atrás las raíces mexicanas. Y es que como se ha convertido en una multinacional es necesario reafirmar esta sensación no sólo de mexicanidad sino de ambiente familiar en donde el comensal se sienta atendido por alguien cercano a él. Es decir, no sólo estamos hablando de la adquisición de alimento, sino de una experiencia de compra. Y esto se logra no sólo por el espacio o la decoración sino también por el uniforme tan mexicano con bordados computarizados que utilizan las meseras de este lugar. Así, juegan una táctica doble: la marca queda grabada en la mente del cliente y se distingue a la empresa del resto.
Estos ejemplos nos permiten ver de manera más concreta y directa la necesidad de implementar una estrategia de marketing para todos nuestros uniformes, sea que lleven bordados computarizados, materiales livianos, u otro tipo decoración. Cada uno de los elementos debe escogerse con mucho cuidado pues es a través de ellos que la gente reconocerá nuestra marca.
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